La mayoría de los partos están programados para los meses que comprenden de enero a marzo. Esto significa que justo ahora estamos en la época en la que las yeguas entran en el último tercio de gestación. Este trimestre es muy importante ya que el potro aumenta su tamaño en más de un 76%. Al mismo tiempo comienza la producción de leche por parte de la madre.
Es por todo esto que satisfacer las necesidades de la yegua gestante se tiene que convertir en algo primordial si queremos que nazca un potro en perfectas condiciones.
La gestación de la yegua
La duración de la gestación de la yegua suele ser de 335 a 342 días (unos 11 meses). A veces, puede adelantarse o atrasarse el parto, variando así el periodo de 315 a 400 días.
Aproximadamente un mes antes de parir, las yeguas comienzan a presentar ciertos síntomas característicos como son la aparición de edema en la parte inferior del abdomen y el aumento de tamaño de las mamas. Estos signos son mucho más evidentes las 2 semanas antes del parto.
La ubre, durante este periodo de desarrollo, permanece firme. Días antes de darse el parto se ablanda ligeramente y comienza a secretar un líquido seroso. No se debe confundir con el calostro (la primera leche que da la yegua), que normalmente comienza a aparecer 1-2 días antes del nacimiento.
La yegua generará entre 3 y 5 litros de calostro que proporcionará la inmunidad necesaria para el potro.
Durante esta etapa también se produce la relajación de los ligamentos pélvicos lo que hará que la cola parezca que se encuentra en una situación más elevada y los músculos de la grupa más relajados.
¿A qué hay que prestar atención en la yegua gestante?
En la yegua gestante deberemos prestar especial atención a su el cuidado general, el ejercicio, la alimentación, la vacunación, desparasitación y la prevención de enfermedades infecciosas. Veamos el cuidado general, el ejercicio y la alimentación.
- Cuidado general
Cuando las yeguas gestantes se encuentran en prados junto con otras yeguas, lo ideal es que estén con las que se encuentran en una etapa similar de preñez. Una de las medidas de control que deberemos tener en cuenta es que las yeguas gestantes que llevan mucho tiempo en nuestra finca no se junten con las recién llegadas o las que llevan un corto periodo de estancia.
Es recomendable que se encuentren separadas también de caballos que puedan trasmitir enfermedades con facilidad, como pueden ser los que viajan a concursos habitualmente.
Cuando nos referimos a separación incluimos no sólo el prado como tal, si no también la comida, el agua y los recipientes en los que los suministramos.
- Ejercicio
Es beneficioso que, durante los meses de gestación, las yeguas sigan realizando su rutina normal de trabajo. Esto se debe hacer a no ser que el veterinario recomiende lo contrario en caso de lesión o cojera. La mayoría de las yeguas gestantes que se encuentran en competición siguen en ella hasta los 5 meses de preñez. A partir de ese momento la yegua podrá realizar un trabajo ligero hasta el último mes.
En el caso de yeguas que no compitan ni se las monte y que se encuentren estabuladas en box, deberán salir al prado un mínimo de 6 horas al día o realizar trabajos a la cuerda.
- Alimentación
Las yeguas que comienzan la temporada de cria deberán tener una condición corporal óptima y su alimentación durante la gestación se irá modificando para que se puedan mantener en perfectas condiciones durante la preñez y la lactancia.
Como hemos indicado antes, el potro presenta su mayor crecimiento en el último tercio de la gestación. Por lo que, si la yegua durante todo este periodo aumenta su peso entre un 9% y un 12%, dos tercios de este aumento se producirán los últimos 3 meses.
Los 8 primeros meses la yegua recibirá la misma alimentación que antes de la gestación mientras que en el último tercio de gestación aumentarán los requisitos de proteína, cálcio y fósforo y disminuirán los requisitos energéticos.
Los requisitos de proteína se cubrirán administrando un pienso indicado para yeguas gestantes (puede ser el mismo que el pienso de potros) y teniendo acceso a prados o a heno de alfalfa de calidad. Con ello cubriremos el aporte proteico que pasa a ser de un 8% en condiciones normales a un 10-12% al final de la gestación.
A veces, con las medidas adaptadas para alcanzar los niveles de proteína necesarios no llegamos a los niveles de fósforo y calcio ideales. Para ello es necesario administrar un suplemento alimenticio como el CALPHORMIN de TRM que cubrirá las necesidades nutricionales de la yegua y ayudará también al correcto desarrollo y crecimiento del potro.
También es esencial cubrir los requisitos de determinadas vitaminas y minerales. Se ha demostrado que madres suplementadas con cobre durante el último trimestre tienen potros más sanos que las que no han sido suplementadas (dosis diaria recomendada: 0.5 mg/Kg, esto es una dosis es de 25ml de Chelated Copper de TRM).También se llegó a la conclusión de que los resultados no eran tan satisfactorios cuando el cobre se les daba a los potros una vez se encuentran en el período de lactancia.
Ademas, la suplementación de la yegua con Vitamina E aumenta la transferencia de anticuerpos al potro por parte de la madre.
VITA E PLUS y CHELATED COPPER SYRUP de TRM ayudan a que los niveles de Vitamina E y de Cobre sean óptimos para asegurar el nacimiento de un potro fuerte y sano.